- Bybit interrumpe sus operaciones en Francia debido a la creciente presión reguladora de la Autorité des Marchés Financiers.
- Los usuarios franceses de Bybit, restringidos a cuentas de “solo cierre”, no pueden abrir nuevas posiciones ni iniciar compras.
Bybit ha anunciado el cese de sus operaciones en Francia debido a las crecientes presiones regulatorias de la Autorité des Marchés Financiers (AMF), el regulador financiero del país. Esta medida supone un cambio significativo para Bybit y su clientela francesa, y señala una coyuntura crítica para la bolsa.
Las restricciones impuestas son especialmente estrictas. Bybit ha puesto todas las cuentas existentes en estado de “sólo cierre”, prohibiendo a los usuarios abrir nuevas posiciones o realizar compras.
Esta directiva se extiende a la interrupción de varios servicios, como la compra con un solo clic, las transacciones entre pares (P2P), las operaciones al contado y las operaciones con derivados. Además, la plataforma dejará de aceptar depósitos, aunque seguirá permitiendo las transferencias.
El 13 de agosto entrarán en vigor medidas más exhaustivas, ya que Bybit tiene previsto cerrar automáticamente todas las cuentas abiertas relacionadas con operaciones al contado, bots de negociación o derivados.
Además, se cancelarán todos los servicios de tarjeta asociados. Se anima a los usuarios afectados a enviar solicitudes de ayuda para recibir asistencia en relación con estos cambios inminentes.
Este endurecimiento de la normativa no es exclusivo de Bybit; el mercado francés de criptomonedas en general se enfrenta a retos similares. Paralelamente, Binance, otro peso pesado de las criptomonedas, ha experimentado problemas similares.
En diciembre de 2023, Changpeng Zhao, fundador de Binance, dimitió de su cargo en Binance France tras las presiones de la AMF. Estos casos ilustran el entorno cada vez más regulado que rige las criptomonedas en Francia.
La decisión de Bybit de interrumpir sus operaciones refleja una tendencia más amplia de escrutinio regulador en el sector de las criptomonedas, ya que las autoridades pretenden establecer entornos comerciales más controlados y seguros.
Esta postura reguladora, aunque protectora, plantea importantes obstáculos operativos para las bolsas de criptomonedas que operan en las jurisdicciones francesas.